viernes, 22 de mayo de 2009

Nos abandonas, o mejor dicho ya nos has abandonado. Recostada en el vértice de mi alma pienso, pienso en cómo va a ser mi estancia en mí misma sin ti. También pienso en todo lo que no he hecho y en todas las cosas que he hecho contigo sin que tú lo supieras. Pero ahí se han quedado, en mí misma sin, finalmente, realizarlas.
El camino se unifica en un sólo trazo, sin ramificaciones que me permitan visualizar varias opciones. Ya me quedé sola, soberana de mí misma y obligada a decidir muchas cosas.
Ahora sin ti, sin tu parte en mí, que era todo.
Mi inquietud, mi ilusión, mi desvelo, mi locura (...) y vuelvo a las andadas recordándote (ya no pensándote), que nos (y digo nos) has abandonado; y vuelvo a estar recostada en el vértice de mi alma pensando... Pensando en cómo va a ser mi estancia en mí misma...sin ti.