martes, 14 de abril de 2009

carne variada


Arráncame de mí y quédate con todo. No lo necesito, pues vivo (o más bien sobrevivo) de tí.
Te regalo mis pulmones, pues tu aire es el mío, que cuando lo contienes o suspiras me... me ahogo. Para tí mi corazón, que va a tirones y ya está podrido de latir. Las mariposas de mi estómago también han decidido huir de mí y seguirte donde quiera que estés.
Podría ir diciendo uno a uno cada órgano, parte o glándula de mi cuerpo que te he regalado hasta sentirme eviscerada, anulada, vacía... En un espectro andante convertida, espero a que me alimentes cual feto en el vientre materno; acurrucado en su mundo.
Yo vivo acurrucada en el mío, esperando. Sólamente esperando...te.

No hay comentarios:

Publicar un comentario